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La Ventaja Injusta

Durante la mayor parte del siglo XX, las empresas líderes en un sector eran consideradas el “player” a batir. El tamaño era una ventaja competitiva, un activo, no un pasivo. A principios de la década de los 90, grandes empresas que habían dominado durante mucho tiempo, comenzaron a decaer, desencadenando un cambio de mentalidad que ha llegado hasta nuestros días. Hoy, parece que la experiencia y el tamaño de una empresa se perciben como un signo de vulnerabilidad, una especie de incapacidad para adaptarse al trepidante ritmo de innovación que marca el mercado.

La realidad actual es que cuando hablamos de “crear nuevos negocios” es muy complicado que no se nos vaya la cabeza hacia el mundo startup como principal alternativa.


¿Y las grandes empresas?

Las grandes empresas han descubierto que, si bien las startups tienen una mayor agilidad, flexibilidad, capacidad y conocimiento para utilizar las nuevas tecnologías con el objetivo de disrumpir determinados modelos de negocio, carecen de las “ventajas injustas” que sólo atesoran aquellas empresas que llevan muchos años liderando sus industrias.

En 7r definimos las “ventajas injustas” como “la capacidad de una empresa para aprovechar activos muy concretos (conocimiento de la industria, clientes, propiedad intelectual, tecnología, red de proveedores, etc.) para identificar y lanzar nuevos negocios”.

  • Ventaja, porque levanta rápidamente barreras de entrada aprovechando capacidades ya desarrolladas que la sitúan en mejores condiciones que el resto de competidores. 
  • Injusta, porque sólo se pueden aprovechar quienes se encuentren bajo el paraguas de la empresa que atesora dicha “Ventaja”. 

De las conversaciones que hemos mantenido en los últimos meses con responsables de Corporate Venturing de grandes empresas españolas, hemos detectado un importante cambio en el “cómo” están configurando su relación con las startups que juegan en su mercado. Han pasado de una postura inicial “defensiva”, a una actitud fuertemente “ofensiva”. Han pasado a jugar al ataque:


El 91% de las grandes compañías españolas espera que dentro de 5 años, entre el 5-14% de sus ingresos provenga de nuevos negocios”

Por tanto, no debe extrañarnos que cada vez haya más empresas que se apalanquen en sus “ventajas injustas” para desarrollar su estrategia de diversificación. Estrategia que, además, les permite crear nuevos negocios de base tecnológica con una eficiencia en el uso de capital muy superior a la de cualquier startup que no disfrute de dichas ventajas.

 

Las 5 fuentes de “Ventaja Injusta”

El Corporate Venture Building se ha establecido como el proceso más eficiente para capturar el valor de estas “ventajas injustas” puesto que también aprovecha lo bueno que tienen las startups (metodología, flexibilidad, agilidad, acceso a talento emprendedor, etc...).

Son 5 las “ventajas injustas” más habituales cuando se hace Corporate Venture Building. Las explicamos junto a un caso de éxito internacional a continuación:

 

1. Conocimiento e inteligencia de mercado

El conocimiento sobre las preferencias y tendencias de los clientes es un factor crítico de éxito en el lanzamiento de cualquier nuevo negocio. El tiempo y coste asociado a la adquisición de este conocimiento por parte de un nuevo entrante, dan a los actores ya presentes una ventaja que, bien aprovechada, se convierte en claramente “injusta”.

Ejemplo: Heineken lanzó Beerwulf para adelantarse a una tendencia de mercado que tenía claramente identificada.

 

2. Acceso a clientes

Disponer de una importante base de  clientes reduce notablemente el tiempo requerido para validar una idea/producto/servicio. Reduce el time-to-market y acelera la tracción del negocio en las fases de crecimiento. 

Ejemplo: Lufthansa usó su base de clientes para lanzar Rydes en 2019.

3. Activos estratégicos

Reciclar la propiedad intelectual, aprovechar activos existentes dentro de la organización, tecnología propietaria o capitalizar una red de partnerships ya tejida.

Ejemplo: Daimler, ante el crecimiento de la economía colaborativa lanzó Share Now (antiguo Car2go),

4. Inversión 

La capacidad de una gran empresa para financiar nuevos negocios en sus fases iniciales, evita que la Venture se distraiga en tediosos procesos de “fundraising”. La startup nace acelerada ya que todo el foco está puesto en validar y construir los cimientos para un rápido crecimiento. 

Todos los ejemplos empleados en este artículo han hecho uso de esta ventaja injusta. 

5. Credibilidad

Aprovechar la marca de una empresa ya establecida resulta decisivo, principalmente en sectores regulados o donde la confianza en la marca es clave para su éxito. 

Ejemplo: Goldman Sachs, lanzó Marcus. Su primera propuesta enfocada al cliente final ofreciendo préstamos personales no garantizados.